Copa Desabrida Argentina 2011

Por César Hurtado

Prácticamente ya se nos fue la Copa América, pero cabe señalar que ha sido un copa que ha destacado, y no precisamente por el alto nivel que tanto se esperaba, sino por el muy pobre desempeño que hemos visto. Se había especulado muchísimo de este torneo debido a la presenca de figuras de altísimo nivel como Messi, Neymar, Tevez, Higuain, Agüero, Alexis, Forlán, Suárez, Márquez Lugo… (Ay perdón… error de dedo). En fin, muchas figuras internacionales de las cuales se esperaba mucho, y que  varios de ellos terminaron por quedar a deber. Sobre todo el último en mención (¿Se esperaba algo de él?).

Ok, basta de ensañarme como el moreliano. El chiste es que simplemente hemos sido testigos de un torneo muy desabrido, con poco espectáculo y, peor aún, 46 goles hasta el momento, una cuota goleadora bastante pobre si lo comparamos con los 78 de Perú 2004 y los 86 de Venezuela 2007. Y vaya que se ve muy complicado que en los últimos dos partidos logren igualar alguna de estas cifras.

Desde luego que por las selecciones se esperaba un mucho mejor torneo, pero en mayor medida, se esperaba mucho de Argentina y Brasil. La Albiceleste, máximo favorito a llevarse el título por su arsenal de miedo, además de su localía, se fue sin ton ni son en los cuartos de final. Messi no apareció sino hasta el tercer partido ante Costa Rica, y luego hay que decir que se aventó un gran partido ante los charrúas, pero no pudo cambiar el rumbo del partido, aunque es injusto cargarle la eliminación pampera al él, pues hay que decir que en general, la selección albiceleste lució inoperante a lo largo de toda su participación. Grave error de Batista al querer adaptar el equipo a Messi, en vez de adaptarlo a un sistema de juego. Mientras que la Verdeamarelha, principal antagonista de los pamperos, también se despidió de la copa en cuartos de final y muy lejos de hacer valer el Jogo Bonito por el que son reconocido, aunque hay que resaltar que tienen ya rato que abandonaron ese estilo de juego. Neymar dio muestra de que aún está muy verde como para ser ese jugador definitivo, le falta mucho por madurar para aspirar a reemplazar al Fenómeno, quien le heredo el número 9 (Si ya sé que uso el 11, pero Ronaldo le heredó su lugar pues), así que carga con un gran peso que solo el tiempo dirá si puede aguantarlo. Y que decir de la manera en que cobraron los penales ante Paraguay, los aficionados debieron estar muy confundidos al darse que cuenta que estaban en un partido de futbol americano, pero los que se confundieron de deporte fueron los jugadores. Así que fuimos testigo de cómo las selecciones más poderosas demostraron muy pocos argumentos y quedaron elimidados de manera tempranera.

Algo que muy pocos, si no es que nadie, esperaba es que el gran animador de esta competencia fuera una de las selecciones favoritas... pero a ocupar el último lugar. Y es que Venezuela sorprendio a Sudamérica, y porque no al mundo, siendo de los que mejor juega desplegaba y mostrando como su selección ha crecido a pasos agigantados, y de paso dandole una cachetada con guante blanco al buen Hugo Sánchez, que se atrevió ha decir que la vinotinto es una selección mediocre. Y a nada estuvieron de estar en la final, puesto que en tiempo extra de la semifinal tuvieron a Paraguay a su merced pero no supieron definir el partido, e incluso la mala suerte, o la muy buena suerte de Paraguay, evitó que pudieran estar en la primer final de su historia. En cuanto a Perú, otro de los que se esperaba poco, lograon llegar hasta la semifinal contra todos los pronósticos, pero una vez en semifinales, ahí fueron presas de sus propios errores, los cuales Urguay no perdonó y finiquito a los incas por marcador de 2-0, y además su principal estrella y en parte responsable del buen papel peruano, Juan Manuel Vargas, no anduvo y perdió la cabeza haciendose expulsar. A final de cuentas quien diría que dos de los equipos de los que menos se esperaba y que suelen estar de relleno de la copa, ahora fueron quienes hicieron ligeramente interesante esta copa que estuvo muy por debajo de lo esperado.

Ahora, pasando al tema de la final, se enfrentaran Uruguay contra Paraguay. Uruguay, digno finalista y de los poco que mostró un futbol aceptable para la pupila enfrentará a Paraguay que parece haber sido tocado por Dios y que cuenta con un Justo Villar convertido en un arquerazo, ya que a pesar de no haber ganado ninguno de sus 5 partidos en tiempo regular y de su pobre desempeño durante la copa, logaron llegar a la final, incluso eliminado al gran animador de esta copa en semifinales, a la sorpresiva Venezuela, que simplemente no pudo con esa gracia de los Paraguayos, a pesar de haberles apedreado el racho y donde hasta los postes hicieron su juego. Por lo tanto, si Paraguay sigue con ese pobre nivel y si aún existe algo de justicia futbolera, el domingo la garra charrúa se coronará sin mayor problema y se convertirá en el máximo ganador de la justa con 15 copas en sus vitrinas.