Por César Hurtado
Decepcionante hasta el momento ha sido ver a la selección Argentina en la Copa América. Y es que con una plantilla repleta de figuras como Messi, Tévez, Agüero, Higuain, Lavezzi, Di Maria, Mascherano, Banega, Zanetti, etc., y que además son el equipo local, con su gente, hacían que se esperara mucho, pero mucho más. Se esperaba ver una aplanadora, un equipo que no tuviera piedad con sus rivales y les pasara por encima de principio a fin.
Decepcionante hasta el momento ha sido ver a la selección Argentina en la Copa América. Y es que con una plantilla repleta de figuras como Messi, Tévez, Agüero, Higuain, Lavezzi, Di Maria, Mascherano, Banega, Zanetti, etc., y que además son el equipo local, con su gente, hacían que se esperara mucho, pero mucho más. Se esperaba ver una aplanadora, un equipo que no tuviera piedad con sus rivales y les pasara por encima de principio a fin.
Bueno, pues la realidad es otra. Bolivia los hizo sufrir, y por ahí pudieron hasta haberles sacado los tres puntos. Por fortuna para la albiceleste apareció el “Kun” Agüero para rescatar aunque sea un punto para una deslucida y poco efectiva Argentina. Contra los cafetaleros, vieron muy de cerca la derrota, de no haber sido porque simplemente los colombianos olvidaron como hacer los goles, pero de que hicieron ver mal a la escuadra del Checho Batista, eso ni dudarlo. Tuvo que ser hasta el tercer partido contra los Ticos para que se volviera a ver a una fuerte e imponente Argentina. En dicho encuentro por fin
despertó el tan criticado Messi, del que todos esperan sea el orquestador de esta desdibujada selección, además de los dos goles de Agüero, que parece ser de los únicos que dan la cara en la cancha por el equipo. Pero no deja de ser un partido contra una selección Sub-22 de Costa Rica. Está bien que tengamos como ejemplo lo de David y Goliat, pero en este caso ya habría sido una reverenda... Bueno, digamos que algo muy exagerado.
despertó el tan criticado Messi, del que todos esperan sea el orquestador de esta desdibujada selección, además de los dos goles de Agüero, que parece ser de los únicos que dan la cara en la cancha por el equipo. Pero no deja de ser un partido contra una selección Sub-22 de Costa Rica. Está bien que tengamos como ejemplo lo de David y Goliat, pero en este caso ya habría sido una reverenda... Bueno, digamos que algo muy exagerado.